KARRA ELEJALDE, Premio Mejor Actor de Reparto en Cine por “Ocho apellidos vascos”.
Cómico y actor con una tremenda energía que no arrolla sino que inspira, sensible, divertido, generoso, sincero… Todo en ‘ísimo’, o en ‘érrimo’. Con un pensamiento crítico propio del que tiene cultura y amor por las personas, y con un sentido del humor propio del que tiene cultura y sabe cómo podemos llegar a ser las personas. Y yo feliz de que premiemos a alguien como él, porque no sólo gana él sino que ganamos todos.
El 20 de Noviembre estrena la secuela de “Ocho apellidos vascos”, “Ocho apellidos catalanes”, rodada en Getaria, Sevilla, Girona y Madrid, y entre otros proyectos tiene entre manos también un Western de cosecha propia. Nos contestó por teléfono a algunas preguntas…
En un año de tantos reconocimientos, ¿qué tiene de diferente este premio de la Unión de Actores y Actrices?
En estos momentos que estamos viviendo, dónde parece que a nuestros dirigentes les apetece más tener un pueblo inculto, llaman a unas cosas cultura de primera y a otras cultura de tercera -parece que a nosotros nos catalogan como esa cultura de tercera división- y trabajar es un lujo; si encima te nominan a Goyas, a los Premios del Círculo de Escritores o a los de la Unión de Actores y Actrices es una pasada.
Y luego hay veces que los premios se dan porque estás de moda o en racha, pero el Premio de la Unión de Actores y Actrices no es de ésos, te lo da gente que sabe de qué estamos hablando y por eso yo le doy muchísima importancia, me hace muchísima ilusión y estoy muy muy muy agradecido.
En la Gala de entrega de Premios se habló y participó la Comisión de Igualdad de la Unión, ¿crees que las desigualdades deben tratar de evitarse a través de la regulación institucional?
A ver, yo creo que el ser humano debería ser capaz de gestionar esto sin necesidad de las instituciones; igual pasa con la policía, ojalá fuéramos capaces de no necesitarla, porque si no, nos la tenemos que comer. Es palmario que en esta profesión hay más guionistas chicos que chicas… pues lógicamente y aunque yo no esté de acuerdo, los chicos hablan de sus cosas, y así las mujeres se quedan a veces en nuestros proyectos como mujeres florero.
Si no somos capaces nosotros, los que hacemos las películas, los que generamos nuestras creaciones en cualquiera de las facetas que engloba el concepto Arte, si no somos capaces de repartirnos esto, será bueno que las Instituciones tengan que darnos el toque, porque lo justo es que hombres y mujeres que están igual capacitados, cobren igual.
En lo tocante a interpretación una película puede tener a veces el doble o el triple de sujetos masculinos que femeninos excepto en escasas ocasiones como son, aquí en España, las películas de Almodóvar, Bollaín, Coixet… Cuando vemos películas de directoras, en muchas ocasiones vemos más personajes femeninos, porque han hablado más de su vida y las cosas de las chicas, lógicamente.
Lo que pasa es que el ser humano es igual de capaz de dar las sorpresas más bonitas y de hacer las cosas más feas, y parece que somos incapaces de autogestionarnos y necesitamos Estados y gentuza que nos robe y nos chulee. Por eso, sería interesante que estuviéramos guionistas, directores y directoras en partidas iguales, eso sería señal de que no tenemos necesidad de mandatos institucionales.
¿Qué te hace reír?
A mí me gusta que el humor sea ácido, crítico. El humor es muy difícil, yo hoy puedo hacer un chiste y mañana lo cuento de la misma manera y no funciona; es difícil aprenderlo en las escuelas. ¡Ay de aquél que pretenda hacer reír y lo constriña todo a una metodología!
A la hora de escribir ¿sigues una línea o vas armando las piezas del puzle poco a poco?
Yo no me siento guionista con mucha experiencia, aunque he trabajado en guiones para Airbag, Año Mariano, Torapia y otros tres más -uno lo queremos rodar el año que viene.
Me resulta muy duro escribir si no tengo un final que me guste mucho y que acabe arriba, procuro escribir abocado a ese final. Cuando escribo guiones me gusta trabajar con más compañeros afines a mí. Nunca lo hago solo.
En el NorthWestern que estamos escribiendo tenemos ya todos los huesos y ahora nos toca ponerle los músculos y la piel. Lo que sí, es que por cómica y gamberra que sea una historia, ha de trabajarse con el mismo rigor y orden con el que se trabaja un drama.
Director/a con quién te gustaría trabajar.
Como he tenido la suerte de trabajar con los mejores de este país, mayores y jóvenes, nopuedo contestar nada a esto. Lo que sí que me gustaría, y algún día lo haré, es interpretar al Quijote; voy a ser muy feliz cuando eso pase.
¿Qué tiene que tener un actor/actriz para que te conquiste?
El don; cuando te sorprende interpretativamente, cuando ante mil versiones anteriores de una misma cosa, llega alguien y dices: ‘ostia, qué buena idea, nunca se me hubiera ocurrido a mí’. Aquí somos muy trascendentales, y muchas veces se nos olvida que actuar en francés se dice jouer y en inglés play, ‘jugar’. Entonces cuando ves a un actor o una actriz y piensas: ‘cómo se lo está pasando’, y se muestran juguetones y te sorprenden… ésos son los que me gustan. Y en España tenemos muchos de éstos.