Mi primera entrevista telefónica podría haber sido con cualquier persona, pero cuando al otro lado del teléfono descubres la voz de Fernando Trueba, sinceramente impone. Yo soy actor y nunca imagine hablar con un director como él -con un Oscar en sus vitrinas-, pero menos aún después de polémicas ajenas a lo que realmente nos importa los que amamos el cine. Trueba siempre sorprende por su sinceridad y porque lo que más le importa es su trabajo, que tanto ama, y lo que pase a su alrededor no está dentro de sus prioridades.
¿Qué ha significado para ti el reconocimiento del premio nacional de cinematografía?
Personalmente a mi no me significa nada, pero como reconocimiento es bueno, hay que agradecerlo y dar las gracias a la gente que te lo da, por supuesto. Pero para mí, con total sinceridad no me significa más que un premio, como un Oscar, que para tu carrera o tu labor profesional te da una importancia y una facilidad de trabajar en más proyectos y una ayuda adicional. Al final, yo no me acuerdo de qué Oscar le han dado a John Ford, pero recuerdo todas sus películas y lo importante que ha sido su carrera. El mejor reconocimiento es el del público de una manera, la crítica de otra diferente y, por último, la historia del cine.
¿Cómo valoras la situación del cine español?.
No sé cual es realmente la situación del cine español, solo sé que está en varios peligros que lleva arrastrando más de treinta años, tiene una lista de peligros tan grandes que podría dedicarle una entrevista solo a eso. El primero es el de no haberse tratado de una manera justa por todos los políticos y gobiernos, no se nos ha defendido cuando hemos estado en boca de la opinión pública injustamente, pues para desacreditarlo tenemos que soportar el hecho de que se den ayudas para realizar películas, pero nadie habla de las ayudas a todos los sectores de la economía.
Además se personalizan, ahora dicen que yo me he llevado no sé cuantos millones de euros, y eso es una rotunda falsedad, yo he participado en películas que han dado trabajo a cientos de personas y en esas películas una parte pequeña de la financiación ha sido por ayudas estatales. A mí no se me ocurre decir que el director de tal periódico recibe tantos millones de euros en ayudas, entiendo que esas ayudas son para dar trabajo a varias personas que trabajan para ese periódico. A veces, es duro hacer películas en España y en eso envidio el trato en Francia a su cine nacional.
¿Cómo te defines como director?
No sabría definirme, soy una persona que hace películas y que ama el cine. Amo también la literatura o el arte, que es un elemento que me inspira cuando comienzo a rodar.
¿En qué te fijas para aceptar un proyecto determinado?
Yo me enamoro de proyectos, no es una cosa racional, es totalmente irracional, igual que cuando te enamoras de una mujer que puede ser tan distinta a lo que tú crees que es tu estereotipo, pero sin embargo caes rendido a sus pies, porque tiene un algo. Para elegir un proyecto siempre me tiene que enamorar, no los hago por cálculos de ningún tipo, siempre pienso en que me atraiga lo suficiente y aun así he tenido éxitos de taquilla.
¿Qué necesita un actor para trabajar contigo? ¿tienes un equipo de dirección de casting?
No he trabajado apenas con directores de casting, pero está claro que a veces ayuda para perfiles muy determinados, hay veces que es cierto que hace falta, pero soy partidario de no utilizarlos. Creo que los directores de casting están obteniendo un protagonismo que tampoco yo se lo quiero quitar, pero en ocasiones lo veo excesivo. Es cierto que cada vez lo necesito más porque hay mucha gente trabajando en teatro y en televisión que apenas veo como espectador y no conozco.
¿Te gusta que los actores aporten cosas o eres muy rígido como director?
Siempre estoy abierto a que propongan cosas, estaría loco si no lo hiciera, los actores y actrices se meten tanto en sus personajes que siempre te aportan cosas, aunque hay veces que digo que no, otras veces me parecen maravillosas y las probamos. Cuando ruedo no me gusta ensayar demasiado porque el actor se mecaniza, me gustan los ensayos mecánicos de movimiento y los ensayos sean ya rodados para no perderme nada de un actor.
¿Has notado diferencia entre actores americanos o franceses con los que has rodado y actores españoles?
Sí que hay pequeñas diferencias pero a la vez hay muchas cosas parecidas. Los americanos tal vez sean los más diferentes porque emplean muchas técnicas de escuelas específicas. Lo bonito del cine es que cómo en la vida hay que mezclar personas diferentes para crear historias.
¿Te resulto difícil dirigir “Chico y Rita” una película de animación?
No me resulto tan difícil porque primero rodé con actores de carne y hueso y eso facilito la labor de los animadores para darle humanidad a los dibujos. El trabajo de los actores es fundamental, toda la gente que me dijo que se había emocionado con los personajes de la película, no podría haber pasado sin el trabajo actoral que había detrás.
Han pasado 17 años de la niña de tus ojos y hace casi tres que se hablo de empezar a rodar de nuevo esta historia. ¿Cómo va el proyecto?
Ya tenemos el guión y estamos preparando la película, mientras hablamos tengo delante de mí las localizaciones y estamos revisando lo que será la película.
¿Qué opinión te merecen los sindicatos como la Unión de Actores y Actrices?
Yo creo que los sindicatos son una cosa muy buena y muy importante, el único problema es cuando hay sindicatos que no defienden a sus representados y piensan más en su negocio. Un sindicato es muy importante para contrarrestar el poder y son necesarios, pero como la democracia tienen que estar en constante examen de autocritica para no caer en las enfermedades y en los abusos.
¿Cómo se toma un ex crítico de cine como tú, las críticas a tus películas?
No las leo la verdad, no es porque me crea mejor que nadie, pero es simplemente porque me aburre leer de mí mismo, leo las críticas a otros compañeros porque me parece más interesante que leer sobre mí o mi película. Además si leo alguna crítica de mis películas, si la crítica es mala me siento fatal, y si es buena me creo más listo de lo que soy, así que lo mejor es no leerlas.
¿Te plantearias realizar alguna serie española?
Podría ser, si me llegase un proyecto que me enamorase, porque no iba a querer, el problema es que viendo las series que hay creo que no encajo en un proyecto que a mí me pudiese gustar, considero que todavía en España somos muy cobardes y no arriesgamos en las series lo que deberíamos, hay talento de sobra pero se hace un tipo de televisión a la que no me siento cercano y creo que guionistas o actores están trabajando por debajo de sus posibilidades, no me parece que seamos ambiciosos.
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Termino la entrevista y me quedé con la sensación de que tuvimos una charla en un café sin más pretensiones que hablar de las cosas con total sinceridad y sin pelos en la lengua, como si sus palabras no fueran a salir del ambiente creado a través del teléfono. Después de casi una hora de charla me fui con la imagen de haber hablado con uno de los directores más importantes de este país y con la percepción de que había sido una conversación amistosa entre dos amigos, que no lo son ni se conocen, pero que parecían conocerse.
Foto portada: Gonzo Suárez